Recientemente me he dado cuenta que entre mis amigos, o mis conocidos cercanos, las historias se vuelven más complejas e interesantes. Ahora son amigos con los que jugué de niño los que se encargan de hacer conexiones de red para miles de usuarios, o son otros amigos quienes están cerca del proceso de fabricación de mis galletas favoritas o los instrumentos de medición que utilizo en la escuela, o incluso hay amigos míos que ya se encargan de enseñar a otros chavos los principios científicos básicos.
Ayer nos visitaron en el lab los alumnos de nuevo ingreso de la carrera, y se ven muy niños. No se en que momento cambio nuestro rostro. Apuesto a que nosotros también nos veíamos así, pero seguro es que ya no. Y fue eso lo que me despertó a esta nueva realidad en la que ya es mi generación la generación que está a cargo del andar de este mundo. Aquí en México así como en el extranjero, empiezo a ver que quienes me acompañaron en algunas partes de mi recorrido ahora están a la cabeza del recorrido del mundo (que no necesariamente en la dirección.)
Alguna vez, hace años, pensé al observar a "los grandes" que llegaba ese momento en que preguntar la edad perdía interés o validez. Esas "edades" en que uno hasta 10 años de diferencia no eran diferencia, ni motivo de división, ni mucho menos de interés. ¿Será eso acaso herencia del caracter biológico del ser humano en el que de niños/adolescentes un año significa enormes cambios y diferencias, mientras que en la edad adulta, un año no son diferencias muy notables (incluso 10)?
No sé de donde provenga esta sensación, lo cierto es que de repente mis amistades ya no se limitan al grupo cercano a mi edad, sino que se expanden en un margen de aproximadamente 15 años. Wow!
Y me sorprendo del margen de edades no porque sean muchos años, sino porque la variedad de experiencias, de caracteres, de actividades que potencialmente existen en un grupo tan diverso es enorme.
Definitivamente estoy envejeciendo...
Atención! Que no es que me sienta viejo, simplemente es que me voy dando cuenta que me agarró desprevenido el crecimiento. Me asombro gratamente al ver que ya estamos en esos lugares que poco a poco nos dan chance de hacer la diferencia y mejorar lo que podamos, pero fuera del afán idealista, mas bien desde el punto de vista de un joven consciente de que ya no es un niño, y que a partir de hace algo de tiempo, ha empezado lo bueno de esta puesta en escena.
¡Este vino se está volviendo gourmet!
Nos vemos en la siguiente recarga de mi lap.
Por cierto, hablando de efemérides, Feliz cumpleaños google!


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