domingo, 27 de marzo de 2011

Si hoy...

Si hoy tuviera que colgar las botas, si hoy tuviera que decir adiós, si hoy fuera el último día en que viera salir el sol, habrían tantas cosas que me faltan, tantas cosas que me debo, y otras tantas de las que me salvé...

Reflexiono.
Quizá soy demasiado joven para ponerme a pensar en dónde estoy, a dónde voy, de dónde vengo. Quizá lo veas como una exageración, pero soy un poco paranoico, un poco precavido, y un muy pensativo...

Pienso que si hoy fuera mi adiós, habrían varias cosas de las que me arrepiento. Soy honesto conmigo, porque si me mintiera yo solo me engañaría y me perdería. Me arrepiento de muchas cosas, de muchos temores y de muchos errores, de varias osadías, y de dos decisiones y de una canción.

Y no pretendo salir con cosas filosóficas y de aprendizaje, que si de los errores se aprende, que si lo que pasa es por algo, que si patrañas! Si hoy tirara la toalla, la tiraría con honestidad, con temor, con decepción.

Pero también con alegría. Si hoy me tuviera que ir, me iría con una sonrisa. Me iría con la satisfacción de haber vivido, de haber logrado varias cosas que nadie hubiera apostado que lograría, pero siendo completamente honestos, no son triunfos, más bien es el fruto de mi mayor cobardía, porque no veo mérito en escapar de lo que no puedes y dedicarte a lo que funciona.

Por eso me iría con grandes ambigüedades. Me arrepentiría de haber huido de mí, de haber cambiado de ciudad por cobardía, de haberme encerrado en el estudio por falta de destreza, por una derrota, por una dificultad.

Me declararía cobarde, me declararía mentiroso, me declararía obsesivo, ambicioso, agresivo, derrotado. Me habría gustado no sentirme derrotado.

Declararía que mis fuerzas las saco del odio y del rencor. Declararía que no se perdonar, y que tampoco se olvidar.

Pero también tendría que admitir que algunas veces construí cositas buenas. Que regalé sonrisas, que las provoqué. Debería reportar que fui capaz de amar, y de perderme en el intento; que conocí la amistad, y que fui afortunado por eso.

Si fuera hoy el día en el cual entregar mi balance final, debería anotar todas las veces que ayudé a alguien, separando las tantas que fueron interesadas y las otras que fueron desinteresadas; debería mencionar mis días más felices, mis días más tristes, mis peores dolores y mis mayores placeres; debería acusar mis injusticias, y reclamar mis deudas; debería confesar mis crímenes, y caridades.

Inevitablemente tendría un balance gris. No sería blanco pero tampoco negro, no sería bueno ni malo, feliz ni triste, pero sería honesto.

Y si fuera necesario entregar nombres, direcciones, valores, números, daría solo los míos, los que presté, los que me robaron, pero no daría lo que regalé, tampoco lo que me prestaron o regalaron.

Pero admitiré que entregaría con un placer enorme a todos y todas quienes me hicieron daño, quienes me forzaron cobardemente a elegir el camino que anduve.
Habrían nombres de todos colores. Empezarían con "J", con "S", con "N", con "K", con "M", con "R", con "G", con "H", con "L", con "P", con "D", con "B" y con todas las vocales (y otras consonantes también),

También promovería puntos a favor de quienes me guiaron por el mismo camino. Los que me iluminaron y corrigeron, los que me acompañaron por convicción, los que fueron capaces de abofetearme de frente cuando creían necesario, quienes me rompieron el corazón de frente, con palabras de advertencia, consideradamente. Los que no me engañaron, los que me enseñaron, los que me dejaron alejarme, los que me dieron libertad. Nombres también que empezarían con todas las vocales y muchas consonantes.

En todo esto reflexiono, pienso, me imagino, porque si tuviera que cruzar el río, quisiera tener preparado el peaje para Caronte, y que él decida si he de cruzar o no. No me permito la arrogancia de esa decisión.

Iré a donde tenga que ir. Solo hay dos maneras de entrar en la cámara final: libre o no libre, y al menos pretendo no mentirme.

Algún día tendré que hacer ese resumen, mis últimas cuentas, mis última bitácora...

But not yet...
Not yet.
Tomado de "La túnica de Neso"

No hay comentarios:

Publicar un comentario